Daneil Doménech - Poesía
Marcos Rivas
abuela murió hace unos días
las corrientes de aire cargan ceniza y deforman las representaciones
hay extrañeza ante los poliedros irregulares
el tránsito a motor de la avenida siente las campanas
quien sale del supermercado las oye
era el pueblo que tiritaba a cada vibración y réplica
con el cobre que convocaba a mi familia
hay almendros que ya mascan brotes en este invierno arrítmico
y la plaza de la iglesia dispone coronas de flores
niños ajenos al coche negro juegan al balón no tan lejos
la iglesia de mi pueblo siempre ha tenido mucho de juzgados de paz y de edificio gubernamental
creer en las cenas últimas le ha exigido al peregrino verdaderos actos de fe
nunca habíamos visto esas torres tan altas
seis de los hombres de la familia quisieron cargar la urna de madera
que no paraba de henchirse de tantos recuerdos que alojaba dentro
madre me preguntó si quería participar y en otro contexto hubiera reflexionado
sobre el concepto de masculinidad
pero yo quería llevar a abuela
y arrancamos en procesión al camposanto
seis cáscaras de nuez que han sentido la lucha desigual contra los tigres
y han perdido la batalla a las campanas de la catedral de colonia
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allí fuera
casa de abuela está orientada a levante
por lo que las tardes hacen las estancias más oscuras
la enfermedad colmaba de avisperos el cuerpo
y las telenovelas fueron la manera de ver mundo
días después asomé el rostro desde casa de abuela y vi cómo el azul se
revuelve con el naranja y vi las corrientes de aire abrazar la palmera
somos del mediterráneo y no sabemos dialogar con la muerte
todos esos nidos de insectos habían negado la ventana a abuela
toda una vida en la parte de sombra en la casa orientada a levante
…
