Poesía de Gloria Gil

1

Si de las maderas dependiese que yo fuera,

no tendría fuerza propia, no tendría

la preocupación de haber herido 

al pasar mi hoja por el envés.

 

Soy granada, alambrada que te oprime, concertina 

que te ayuda cuando son jirones 

ya tus manos. 

 

El disfraz del disfraz de una droga que no engancha. 

 

Ínfima mota de polvo. 

 

Olvida, por favor, 

olvida este poema.

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2

Preparo las pastillas los domingos:

las vitaminas,

los minerales,

los antidepresivos.

 

Con el cuidado del jardinero que introduce semillas

solo un centímetro por debajo de la tierra, no más,

(ponlo fácil a la energía de cada planta) 

coloco cada cápsula. 

 

Es un calendario de angustia y esperanza, sé que soy

porque pasa otra semana, 

sin que haya pasado realmente. 

Todo está

[bien].

 

Mi cuerpo

no ha podido crear esa savia,

esa magia de la que te hablo 

que hará crecer verde, flores, sensateces.

Gloria Gil

Gloria Gil (Madrid, España, 1983). Publicó La voz en la medianera (editorial Isla Elefante, 2023) y Corredora de fondo, jugadora de todo (editorial Zoográfico, 2021). Participó las antologías En legítima defensa. Poetas en tiempos de crisis (2014), La manera de recogerse el pelo (2010) y La periferia del vacío + La caja metálica (2009). También en Bukowski Club: Jam Session de Poesía 06-08 (2008).

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